Debido a la situación sanitaria, el surf también se tuvo que adaptar a las nuevas condiciones y a estar fuera del agua. ?Nuestro trabajo en los 110 días que estuvimos sin entrar al agua fue más de contención. Se hizo toda una tarea interdisciplinaria con psicólogos, nutricionistas y un equipo de profesionales para sostener a los y las atletas en esta situación durísima?, explica Pedro Ghilini, entrenador de las categorías junior.
Y agregó: ?Los chicos más grandes y los de Dakar fueron los más afectados; los primeros tenían tres competencias en su último año para obtener los resultados que te mantengan dentro del sistema de apoyos y pasaron a cero. Y los segundos se quedaron sin la posibilidad de ir a los Juegos Olímpicos de la Juventud?.
La competencia junior será hasta el 20 de octubre. En lo que respecta al circuito argentino de mayores en categoría Open, la Asociación de Surf Argentino (ASA) está en diálogo con la Municipalidad para conformar un protocolo sanitario completo. La idea es que esta competencia se pueda habilitar para finales de noviembre, y también sería en formato virtual.
La vuelta a los entrenamientos en Mar del Plata se dio con un grupo de 20 deportistas de los distintos seleccionados juveniles y, obviamente, adaptados al protocolo aprobado para la práctica de su deporte. ?Tuvimos que reeducarnos en muchos sentidos y ser muy estrictos con las medidas sanitarias. Se habilitó un entrenador cada cinco atletas, así que nos dividimos en grupos. Los chicos tienen que mantener el distanciamiento y no pueden intercambiar elementos entre ellos, cosas comunes como prestar la parafina. Además, deben llegar cambiados y con barbijo?, detalló el coach que lidera el equipo conformado por el preparador físico, Pablo Ursino, el director del proyecto Dakar, Fernando Elichiribehety, y el asesor técnico internacional, Rubén Muñiz.
Fuente Qué Digital