¿Qué es algo que los niños no saben hacer, pero los
profesores no enseñan? Si has respondido "cursiva", escribe una "A"
de aprobado, mayúscula y fluida a mano en tu boletín de notas. La letra cursiva
(un estilo de escritura con letras unidas y florituras que avergüenzan a la
simple letra de imprenta), antaño un elemento básico de las aulas y la
correspondencia, está en declive.
¿O quizás no del todo? TikTok o Instagram demuestran que
este arte sigue muy vivo: pensemos en los bullet journals (esas agendas tan de
moda donde uno puede exprimir su productividad), video demostraciones de
caligrafía en redes sociales y hashtags que han sido tendencia en los últimos
meses en Estados Unidos como #penmanship, #cursive o incluso #penlife, todos
inundados de fotos de caligrafía impecable en tinta de alta gama.
Aunque cada vez se comunica más con teclados, hay expertos
preocupados por la moderna falta de alfabetización en cursiva. Schaefer-Jacob
señala que los historiadores y archiveros recién licenciados no necesariamente
leen o escriben en cursiva, y pueden sentirse desconcertados ante documentos de
archivo escritos a mano.
Hay alguna ayuda para quienes se enfrentan a una maraña de
escritura confusa. Los farmacéuticos y los médicos están entre los últimos
bastiones de los trabajadores modernos de los que se espera que sepan leer y
escribir en cursiva, y a menudo reciben cursos especializados para escribir
bien a mano (y descifrar los garabatos de otros) durante su formación. Del
mismo modo, los historiadores pueden seguir cursos especiales de paleografía
para familiarizarse con las antiguas formas de cursiva.
En cualquier caso, estar familiarizado con la cursiva
moderna da a los historiadores una ventaja en los archivos, indica
Schaefer-Jacob, y tanto a ella como a otros investigadores les preocupa que el
pasado siga siendo inaccesible sin una enseñanza continua de la cursiva en las
escuelas.
Los historiadores no son los únicos que abogan por el
resurgimiento de la letra cursiva. Terapeutas ocupacionales y psiquiatras
afirman que ayuda a desarrollar la coordinación mano-ojo, el desarrollo
cognitivo y la motricidad fina, por nombrar solo algunos aspectos. La enseñanza
de la escritura a mano se ha relacionado con el éxito académico y, en una
revisión bibliográfica de 2007, los investigadores escribieron que una mala
escritura a mano conlleva "consecuencias académicas y psicosociales de
gran alcance".
Esas consecuencias han creado en Estados Unidos grupos
defensores de la escritura a mano: grupos de interés como la Asociación
Nacional de Escritura a Mano, embajadores de la caligrafía en Internet e
incluso legisladores. Después de que los estados adoptaran los estándares
Common Core, que reducían la enseñanza de la letra cursiva, los legisladores de
varios estados respondieron insistiendo en que la letra cursiva es necesaria, y
ordenaron la enseñanza de la letra cursiva en sus estados de todos modos.
A partir de 2023, 21 estados exigirán que la escritura
cursiva se enseñe en la escuela, y este año Michigan ha aprobado una ley que
exige el desarrollo de un plan de estudios opcional de escritura cursiva para
sus escuelas públicas. Puede que la cursiva esté en peligro, pero desde luego
no ha muerto todavía (y si no que se lo pregunten a Gillian Goerz, una artista
cuya serie "resolviendo" letras cursivas ha acumulado millones de
visitas en TikTok) y, con los nuevos medios y la nueva determinación de
preservar sus rizos y letras conectadas, puede que viva para pasar a una nueva
página.