Cuando Roberta Williams diseñó a Rosella, la princesa protagonista de Kings Quest IV (1988), causó un gran impacto en el medio. Los jugadores estaban acostumbrados a rescatar princesas, no a controlarlas, y en Sierra temían que este cambio resultara demasiado atrevido. No obstante, según registra IGN, en las fases de prueba descubrieron que a los jugadores masculinos les daba igual el género del personaje principal, y que estaban más interesados en la historia y los puzles. Rosella, al estilo de una princesa Disney, era la protagonista de su propia aventura, así como muchas más heroínas que la siguieron después y que nos han proporcionado un medio mucho más diverso y rebosante de creatividad. Y, no obstante, Rosella no fue la primera mujer en protagonizar un videojuego. Hoy te contamos la historia de cómo los personajes femeninos se abrieron paso en el ocio digital.