Debemos ser la generación que "googlea" sobre síntomas y enfermedades, porque suele responder cualquier pregunta que surjan por parte de los usuarios. Esto suele ser con el fin de hacer un posible primer diagnóstico, pero este comportamiento puede tener consecuencias negativas.
Aunque en internet se puede encontrar información fiable e
interesante, la proliferación de contenidos digitales relacionados con la salud
dio lugar a un nuevo fenómeno denominado "cibercondría". Es el hábito
de buscar obsesivamente información sanitaria en la web y desarrollar una
ansiedad excesiva sobre el propio estado de salud.
Según los datos reportados, en 2022, en Finlandia, el 81% de
las personas son propensas a usar la red para buscar información vinculada con
la salud, con respecto al 58% que lo hacía en 2011.
La evolución de esta tendencia es bastante similar en los
demás países europeos, a excepción de Alemania y Luxemburgo, donde el
porcentaje disminuyó del 54% al 37% en el primero y del 52% al 46% en el
segundo.