Ya pasada una semana de la desafortunada noticia, nos
quedamos pensando sobre la solidaridad argentina y la indiferencia de nuestros
vecinos. A raíz de esta inquietud, surgen interrogantes de los "porqués" de su
indiferencia y el compromiso del argentino ante la adversidad ajena.
Un maestro argentino jubilado murió, luego de mendigar por
atención medica en Bolivia. Familiares de la víctima denunciaron que los
médicos bolivianos le negaron la atención porque no tenía moneda local para
pagar.
Quienes al momento estaban compartiendo el viaje con
Alejandro Benitez contaron que, el maestro argentino sufrió un accidente por el
cual debió haber tenido atención inmediata de los médicos en el hospital. Pero
que nada de eso ocurrió, muy por lo contrario, desde el hospital se mostraron
resistentes a prestar sus servicios ya que los argentinos no contaban con "pesos
bolivianos". Luego de la demencial respuesta que recibieron los acompañantes
por parte los médicos bolivianos, salieron de la clínica médica urgidos por la
necesidad de conseguir el cambio de divisas para salvar la vida de su
compañero, pero la desafortunada desidia de los bolivianos fue la responsable
directa de la muerte del maestro argentino.
Si bien hay muchos que vienen para tomar servicio sin costo
alguno de nuestra medicina pública y gratuita, el argentino por más que le pese
a muchos, siempre se ha mostrado y se muestra solidariamente empático ante las
necesidades ajenas. ¿Pero qué pasa cuando un argentino se encuentra en una
situación crítica como la que padeció Alejandro Benitez? ¿Dónde queda la
reciprocidad solidaria de nuestros hermanos limítrofes?
![]() |
Soy colombiano, he vivido por 3 años en Argentina y me consta como el estado argentino atiende y ayuda a los ciudadanos bolivianos que viven legal o ilegalmente, en territorio argentino. Que pasa también con el estado boliviano que no es solidario con los argentinos. Verdad que da coraje esa actitud de indiferencia y falta de solidaridad. |
![]() |
![]() |
En el 2021 necesitaba atención odontológica y mi obra social no atendía por la pandemia, entonces me dirigí a la guardia odontológica del Hospital. Pedí un turno y me dijeron NO HAY. Soy argentino y no había turno. Pero no en sala de no espera había aproximadamente 50 personas esperando ser atendidas. Pregunte y me informan que son pacientes con turnos programados. El 99,9 por ciento y dicho por personal de seguridad, eran extranjeros, en su gran mayoría bolivianos |
![]() |