La Fundación CRAM para la Conservación y Recuperación de
Animales Marinos de El Prat de Llobregat (Barcelona), participa desde hace
cuatro años en colaboración con Quadpack Foundatios, para determinar qué
opciones de actuación existen para la conservación de nuestros mares y seres
que habitan en ellos.
Un estudio que según Lucía Garrido, responsable del área de
clínica y rescate, tiene como objetivo "conocer el estado de conservación de
los mares gracias a las tortugas marinas como indicadores. Y también conocer un
poquito más sobre los problemas de estos pacientes".
Según el análisis publicado por los voluntarios, un 92 % de
las 70 tortugas marinas de la especie "Caretta Caretta" atendidas el año
pasado, tenían macroplásticos en su aparato digestivo. Los desechos plásticos
los obtuvieron de 54 muestras entre heces y contenido digestivo de las tortugas
marinas.
Los residuos plásticos son una amenaza para las especies que
habitan los mares y océanos, provocando diferentes patologías como heridas u
obstrucciones digestivas, que pueden desencadenar graves problemas de salud o
incluso la muerte. En este estudio, los biólogos han puntualizado que la conciencia
social ha ido a mejor, pero existe una problemática en el mar.
"Lo que hemos visto nosotros en cuatro años de estudios es
que ha ido creciendo la cantidad de plástico que tiene el mar", explica la
responsable de área clínica y rescate de CRAM. El análisis de estos animales
nos hace conocer cómo se encuentra el estado de nuestros océanos, y con ello,
poder poner remedio a una situación que no solo afecta en la vida marina, sino
en la vida de todos los habitantes del planeta.