No voy a hacer fila en el baño, ni quejarme por esperar para comprar birra, ni correr de un escenario a otro para llegar a ver todo, porque por más que no me guste alguna banda nunca me quiero perder nada.
No hay previa, no hay gente. La computadora y el televisor. Yo que estaba tan renegada a esto, voy a ver un festival por una pantalla.
Empecé por Juli Rada, mucho estilo y puro groove, altísimo potencial, se viene ganando el espacio y no falla, buena banda para un horario más central y con más tiempo.
"Todos los políticos son una mierda" llegué para escuchar un poco de 2'. Los clásicos de siempre, y cantados como siempre. Después de la ternura de Julieta Rada, te diría que un poco molestan ahí de fondo.
Dije"¿Quién es este que está en boxer a lo Axl Rose?" Fiesta Cuetillo, una banda boliviana y otro tema dedicado para los políticos.
Pensé un par de veces durante el festival: Che, estoy viendo un recital en la tele, caí en esa. ¿La nueva era? ¿La nueva normalidad? -detesto que lo digan-.
A.N.I.M.A.L tocaba en el Teatro Vortreix, pero hubo una falla en el streaming, imposible de ver. Después comunicaron que el martes 21hs se va a compartir el show de la banda para los suscriptores. Tampoco hubo suerte para Los Tipitos que no pudieron cumplir con su actuación en el mismo teatro.
Aviadores del Chako "¿A ver qué onda?, dejemos este escenario" banda paraguaya, buena generadora de ambiente. Captó rápidamente mi atención, una especie de reggae- soul que me sorprendió y gustó.
Si bien no venía muy arriba, Loli Molina desde México, te hace bajar varios cambios, con un show super intimista y voz dulce.
"Bueno ahora sí, esto lo quiero disfrutar", pensé. Cielo razzo, media horita, QUE MANIJA. Me acordé de mi primer Cosquín, allá por el 2009 cuando me sorprendió muchísimo el público rosarino.Hoy tocando sin gente. Banda bien festivalera, ahí se destapó la primera birra, y se empezó a rockear un poco, como se podía.
Un poquito de Rada y los Colibriquis, muy histriónico, jugando muy bien con las cámaras. Se posicionaron como una banda re aceptada que te toca un pop, un rocanrol y te mete un tema más trapero.
Eruca Sativa, otro de los platos fuertes que estaba esperado. "Claro, Lula está embarazada" pensaba mientras la banda se mostraba con otro formato, una batería electrónica, y cada integrante desde su casa. Suenan excelente y encajan a la perfección, pero esa química de estar juntos en el vivo faltó.
De Eruca fui a Julieta Venegas. De una montaña rusa a un paso lento, cada vez más lento. Mientras la escuchaba no podía descifrar bien lo que sentía. Sí, me gusta, me relaja, pero quiero guitarras, bajo y batería.
Rarísimo lo que pasó, la cortaron en el medio de un tema sin decir nada. La frialdad de las pantallas.
Vi muy poco de Miss Bolivia pero lo suficiente para remarcar lo super embanderada que está con el feminismo y que su show es fiesta.
Los Caligaris mucha alegría y a puro hitazos, papelitos, colores y mucha fiesta que a lo visual le suma un montón.
"¿Dónde está facundo?" grita Germán Daffunchio de Las Pelotas, antes de que empiece a sonar 'Desaparecido' ¿Qué es esto?, ¿Qué está pasando aquí? me lo vengo preguntando desde el 30 de abril.
Banda prolija, potente y con la fuerza y el mensaje de siempre.
Algo para remarcar que después de medio festival molestaba un poco, fue la diferencia de volumen entre un escenario y el otro. Mientras noté eso, pensé en cuánto hacía que no escribía sobre un evento en vivo. ESTOY VIENDO UN RECI EN LA TELE.
Entre algunos temas de Sara Hebe y otro poco de Los Pericos, me quedo un buen rato en Louta, me llamaba la atención cómo iba a ser el show, porque es de los artistas que juega muchísimo con el público, apunta a la estética y a la escenografía. Le puse expectativas. Un set donde se lo vio a pleno con su faceta actoral, pero no me sorprendió, imaginé alguna flashadita a lo Louta porque sus shows son re visuales, de hecho me atrae más eso que su parte musical. Me comí la peli.
Nagual sonaba del otro lado, con la remera de Santiago Maldonado y la bandera Wiphala. Otra banda que viene pisando fuerte en la escena nacional. Con mensajes claros, directos y con la esencia del "viejo" rocanrol. Guitarras fuertes y mucha potencia, de hecho colgué con ellos y me olvide de Ciro.
Llegué diez minutos tarde para Ciro y Los Persas, encargados del cierre en el escenario principal, como siempre buena energía, te hacían parte del show. Jugó con las cámaras como ninguno. Empezó a sonar 'Tan solo', "este tema lo canta la gente", pensé. Rara, emocionante y hasta un tanto desoladora la versión a capela con Ciro en el medio de un Luna Park vacío. Tan solo.
Era como estar dentro de un videoclip constante. Bailan, saltan, lo gozan, lo trasmiten. El teatro para ellos, corriendo por todo el campo del Luna. Te guste o no su música como show son imbatibles. "Espero que nos veamos pronto transpirando todos juntos"
"¿Hay tiempo? ¿Entra?" preguntó antes de que arranque a sonar 'Cruel'. De lo que vi de streaming, lo mejor. La única aventura es ver colores. Como siempre terminó con el Himno Nacional Argentino.
Ciro cantando "Tan Solo" en un Luna Park vacío me puso los pelos de punta. #CROnline #CosquinRock pic.twitter.com/MxPDvyVUXX
— Hermes DV (@hermes_dv) August 9, 2020
¿Me quedé hasta que terminó la Bresh? Si, me quedé hasta que terminó la Bresh
Cuatro escenarios, multicamaras, un chat en vivo, un gran despliegue de muchísimos artistas de iberoamérica. Sin cansancio, sin el vasito de cada año, sin la adrenalina previa, el calor de la gente y la emoción. En la cama, en el living o en la cocina. El Cosquín Rock en tu casa.
Imagen: Instagram Ciro
-Deborah Bermúdez-