La jornada es promovida desde 1993 por la Organización de las Naciones Unidas (ONU). "El objetivo" Concientizar sobre la "crisis mundial que sufren 2000 millones de personas" al
vivir sin acceso a agua potable. "Se espera que estas cifras vayan en aumento
debido a la aceleración del cambio climático y al crecimiento de la población",
estimaron desde el organismo.
Y alertaron: "En los últimos 20 años, el almacenamiento de
agua terrestre, incluyendo la humedad del suelo, la nieve y el hielo, ha
disminuido a un ritmo de 1 centímetro por año, con consecuencias importantes".
Más allá de estos datos, cuando hablamos del agua estamos
haciendo referencia a una sustancia fundamental no solo para los humanos, sino
también para el planeta Tierra en general. Por caso, en lo que concierne al
cambio climático, la ONU postuló que los sumideros naturales de agua como los
humedales, los manglares, las praderas submarinas, las marismas y los pantanos
son altamente efectivos para "absorber y almacenar carbono, lo que contribuye a
reducir las emisiones de gases de efecto invernadero".
En el mismo sentido, según la mencionada entidad, el agua de
los océanos es esencial para estabilizar el clima, ya que, entre otras cosas, "genera el 50% del oxígeno que necesitamos, absorbe un 25% de las emisiones de
dióxido de carbono y captura el 90% del exceso de calor generado por esas
emisiones, es decir que actúan como los pulmones del planeta y como el mayor
sumidero de carbono".
"El agua está en el epicentro del desarrollo sostenible y es
fundamental para el desarrollo socioeconómico, la energía, la producción de
alimentos, los ecosistemas y para la supervivencia de los seres humanos", dice
la ONU. ¿Por qué? Entre otras cosas, porque "las aguas contaminadas y la falta
de saneamiento básico obstaculizan la erradicación de la pobreza extrema y de
las enfermedades en los países más pobres".